En podología, las infiltraciones son procedimientos terapéuticos que consisten en inyectar medicamentos directamente en una zona específica del pie (como articulaciones, tendones o fascias) con el objetivo de aliviar el dolor, la inflamación o tratar ciertas patologías.
¿Qué son las infiltraciones en podología?
Son inyecciones localizadas que generalmente contienen:
- Corticoides: antiinflamatorios potentes.
- Anestésicos locales: para alivio inmediato del dolor.
- Ácido hialurónico (en casos de artrosis).
- En algunos casos, plasma rico en plaquetas (PRP) o terapias regenerativas.
¿Para qué sirven?
Se utilizan para tratar diversas afecciones del pie cuando otros tratamientos (plantillas, fisioterapia, medicación oral) no han dado resultados suficientes.
✅ Indicaciones comunes:
- Fascitis plantar.
- Espolón calcáneo.
- Neuroma de Morton.
- Bursitis.
- Tendinitis/tendinosis (Aquiles, tibial posterior, etc.).
- Artrosis (principalmente en articulaciones metatarsofalángicas).
- Sinovitis (inflamación de la membrana sinovial).
- Síndromes dolorosos articulares o periarticulares.